Abarka

La hechicera de Zeanuri

AkelarreUn día de Año Nuevo de gracia 1572, alguien declaró de manera lacónica “que en la iglesia de Zeanuri y sus alrededores habia muchos brujos y brujas que hacian mucho mal”. Un determinado Pedro de Aranguren fue más lejos denunciando a Juan de Goitia y su hija mayor de practicar actos de brujería, superstición y exorcismo. Obviamente, su especialidad era impedir que los acoplaras de recién casados pudieran tener informes carnales tenidos éxito.

Mayora intentó defenderse que dice que todas estas declaraciones “eran cosas santas ya que, de una forma o de otra se habían bendecido a la iglesia”. Además, negó que, si las hubiera colocado por negligencia, no lo hizo por voluntad.
Por último, Juan de Goitia de satisfacerse con una multa de 6.000 maravedis (moneda del tiempo) y con un año de prohibición de estancias en Zeanuri.
Además, se le condenó a salir de la prisión en la cual era, las manos vinculadas y los objetos de brujería fijadas en su cajón y que esté llevado en lugar público, a la vergüenza general. De pagar 3.000 maravedis suplementarios y prohíbe en todo el territorio del señorío de Bizkaia. Por su parte, la víctima de estos terribles hechos terminado por curarse de su mal, ya que de gastar de buenas sumas de dinero en misas y que recurren a un curandero de Urduña.

Fuente : Sorgiñas, leyendas vascas de brujas ISBN: 84-95846-46-2 © de la Edición "Los libros del cuentamiedos".

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