Abarka

Una bruja atrapada

El gato negroEn un caserion de Hondarribia, el ganado comenzó a enflaquecerse peligrosamente en el corral. Como esto no podía ser sino la obra de bruja según el cura, le tendieron una trampa para cogerla. Una noche, encendieron dos cirios bendecidos en el corral que reflejaron en el cojeado con su parte inferior abierta. Sobre la parte, elaboraron un bolso con objetos para esconder los cirios bendecidos a la bruja. No tardó en aparecer en forma de un gato negro subido sobre una vaca, amenazando. Los hombres abandonaron su escondite y encendieron la luz. Inmediatamente, el gato les suplicó apagarlo, pero éstos temiendo que se escape, lo dejaron encendida. Así pues, cuando amaneció, pudieron constatar que el animal se transformó en una vieja mujer de la vecindad.

Fuente : Sorgiñas, leyendas vascas de brujas ISBN: 84-95846-46-2 © de la Edición "Los libros del cuentamiedos".

     Anteriora