Mari y otras divinidades

Entre las figuras mitológicas vinculadas a la tierra (lur) y con más presencia en País Vasco, se traslada Mari, situada sobre las otras ingenierías. Se conoce bajo varios nombres como Maya, -Andre lezeko y Loana-Gorri. Según las regiones, el nombre está vinculado a la montaña o el lugar que es juiciosa vivir. Par exemple, basko Mari (Mari del bosque), Aralarko Damea (la Dama de ARALAR) ou Anbotoko Sorgiña (la bruja de Anboto).
Ella vive bajo tierra, en las grutas o cavernas grandes montañas, rodeada de riquezas, desplazándose de vez en cuando exteriormente a través de las cumbres y otros conductos subterráneos. Una vez afuera, se desplaza en los aires, visitando sus distintas residencias en los distintos lugares de las montañas vascas.
De sexo femenino, Mari puede señalarse de distintas maneras: una de la más extendida es la de la ser muy bonita y muy elegante mujer. En sus viviendas subterráneas, es frecuente que muestra una parte de sus miembros de forma animal (pie de cabra o pájaro) o que toda su cara sea zoomorphico (toro joven, yegua, etc). Por el contrario, exteriormente, cuando viaja por los aires, esta rodeada con fuego en forma de nube rojiza o ráfaga de viento.

Mari vive bajo la tierra, conectada con la superficie por medio de los precipicios, pozo y cavernas. Se dice que un día, un cura de Mugiro (Navarra) iba a celebrar una misa en el mismo territorio que Mari. Si durante la misa, Mari se encontraba allí, no granizaba de todo el año en el lugar. Pero Mari todavía no ha sido fuente de temores, frecuentemente, la gente la buscaba para consejos y ésta respondía siempre precisamente.
Una vez, en la fragua de Iraeta (Gipuzkoa), no pudiendo poner en marcha su fragua, el herrero se dirige hacia la gruta de Mari en Anboto. Después de haberle explicado sus problemas le solucionó el problema que dejaba al herrero muy satisfecho.

Se garantiza que es la reina de los restos de los genios, estando vinculado con Maju (también definido como Herensuge o Sugaar (la serpiente masculina) que es su camarada y que genera tormentas cuando se encuentran. Tienen también dos niños quienes, en algunos lugares, son los hijos (Mikelats et Atarrabi). Véase la leyenda .
Uno de los principales empleos de Mari es el tiempo que dedica a la propagación de las tormentas contra las cuales es necesario hacer ofrendas (oveja o otro animal, monedas…) quiénes permitirán evitar estas catástrofes. Además, es posible alegarlo para obtener favores y, incluso, visitarla en su residencia, respetando siempre algunas normas y comportamientos. Por estas leyendas, resulta que Mari es implacable con los mentirosos, los orgullosos, los ladrones y con los que no practican la ayuda mutua y la solidaridad entre los humanos, castigándolos con distintas fórmulas.

Uno de la Divinidad más conocida es el Aker (chivo) y en particular el Akerbeltz (chivo negro). Una de su capacidad era influir bénéfiquement sobre el ganado colocado bajo su protección. Adquirió una gran reputación en la brujería, para su Presidencia y su adoración en el “Akelarre” celebradas en distintas regiones del País Vasco. El conocida de las ceremonias permanece las de la gruta de las brujas en Zugarramurdi (Navarra) debido el también al muy celebro“ pleito de las brujas ”.

La típica ingeniería del carácter subterráneo con forma de serpiente, con uno o más cabezas, se llama Herensuge, Sugaar o Sugoi.
Se alimenta con animales y con seres humanos, surgiendo rodeado con llamas. Como lo dijimos más arriba, es el camarada de Mari. Hay varias versiones sobre la muerte de Herensuge. En el Labourd, se dice que se ha matado por Gaston de Belzunce pero la versión más extendida es la que sitúa la muerte de Herensuge en el viejo santuario San Miguel de Aralar. Sucumbió a los golpes pegados por San Miguel, consecuencia tiene una solicitud de Teodisio de Goni. Se dice que después de este acontecimiento, una iglesia se elevó, sobre la caverna a la cual salía Herensuge. Existe aún una pequeña ventana, sobre la parte derecha del altar principal que, dicho, conduce el interior de la caverna. La gente pone la cabeza, récitant un credo, para la curación de los males de cabeza.

Hay toda una pléyade de ingenierías que se presentan bajo formas animales como Zezengorri (toro rojo) y Beigorri (vaca roja), dedicadas al guardia de las grutas y otras alcurnias semimisteriosas.

Fuente: geocities. traducido por Txiki.

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