Un día, dos campesinos iban detrás sus fijaciones de bueyes. Eran un tanto desatentos, bromeaban, cuando repentinamente uno de ellos vió venir un hombre hacia ellos.
Era una de estas personas que lanzan el mal ojo sin quererlo. Al momento mismo, se descartó de su camarada y se colocó en cabeza delante de sus bueyes, esgrimiendo su aguijón respecto al lanzador de mal ojo. Pero el aguijón no pudo resistir a la fuerza del mal ojo y se redujo en pedazos.
Sin embargo, gracias a la rapidez de su amo y al sacrificio de su aguijón, se entregó a los bueyes clara de una desdicha.
Fuentes :
Bibliografia : Légendes et Récits populaires du Pays Basque - Jean-François CERQUAND - Editions Aubéron
"légendes basques" de Jean Barbier Editions Elkar 1982
Dictionnaire Illustré de la Mythologie Basque - José Miguel de BARANDIARAN, traducido y anotado por Michel Duvert - Editions ELKAR
Extractos resultantes de un labor de investigación de la asociación LAUBURRU. Michel DUVERT - Claude LABAT - LAUBURU BP 314 64103 BAYONNE cédex
Contes populaires et légendes du Pays Basque" les presses de la renaissance PARIS.
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